Escribo poemas del alma,
a veces inciertos, a veces despierto.
Fundo estaciones del corazón en mis adentros.
Escribo para oídos sin nombre,
para aquél que teme al despertar.
Toco acordes del ánimo con mis dedos.
Escribo de noche, y la luna me abriga a lo lejos.
Eterno astro de piedra y estaño,
que regalas tu reflejo.
Escribo porque amo. Vivo porque escribo.
De tierra y fuego es el corazón del horizonte.
De lino y seda mis recuerdos.
Escribo a escondidas,
porque así te robo un beso.
Callado, con sueño.
Salgo corriendo.
Abro los brazos y no entiendo.
Subo un instante la vista al cielo.
Y escribo, feliz, para tu lado eterno.
Escribo poemas del alma
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